Con una planta solar térmica el agua se calienta de forma gratuita. La energía solar térmica consiste en el aprovechamiento del calor solar mediante el uso de paneles solares térmicos. El panel solar capta los rayos del sol, absorbiendo de esta manera su energía en forma de calor. A través del panel solar hacemos pasar el agua de manera que parte del calor absorbido por el panel es transferido al agua y así eleva su temperatura para ser almacenada o llevada directamente al punto de consumo.

          Un sistema fotovoltaico, se convierte en un generador de energía y es una inversión sensata. Hasta las fachadas pueden generar energía. Además, suministra electricidad incluso en días nublados.

         Para un sistema con un 1 kW de potencia el espacio que necesitamos en el tejado es de 8,6 m² aproximadamente. Montado en el techo, los paneles solares convierten la energía del sol en corriente continua, que a su vez se convierte con un inversor a 230 V. Esta corriente se utiliza directamente en  la vivienda, lo que reduce la cantidad de electricidad que se debe adquirir, reduciendo considerablemente la factura a pagar. Si generamos energía en exceso, la podemos ceder a la red y recuperarla cuando lo necesitemos.

También podemos generar corriente eléctrica mediante un aerogenerador en las zonas especialmente ventosas.

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         El agua de lluvia es un agua pura y limpia ideal para la lavadora o el riego al no contener cal ni productos químicos.  Permite ahorrar gran cantidad de agua potable substituyendo los usos no potables como el WC, la lavadora, limpieza o el riego por agua de lluvia.  Un sistema de recogida de agua de lluvia, según el uso, puede costar entre 2500-5000 euros. Los costes anuales de mantenimiento son de unos  100 euros. 

                                                                                                                                                                                                   SUBIR

          Una chimenea solar consiste en una chimenea pintada de negro. Cuando el sol calienta la chimenea se genera una corriente ascendente de aire en su interior que facilita la salida de éste, favoreciendo la ventilación natural dentro de la casa y rebajando la temperatura de ésta respecto a la del exterior.

          En buena parte del mundo es más simple aprovechar los vientos predominantes del sitio, pero en días en calma y cálidos este tipo de chimenea puede proporcionar la ventilación donde de otra manera no habría ninguna. El pozo canadiense también nos permite, de una manera natural, calentar el aire en invierno y enfriarlo en verano.

Ventilación controlada descentralizada con recuperador de calor (se recupera el 91% del calor del aire interior)

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          Nosotros sujerimos este sistema de calefacción ya que es económico, elegante, rápido de colocar, eficiente y no requiere mantenimiento. Combina perfectamente tres sistemas de calefacción en uno: radiación, acumulación y convección.El costo medio para una casa de 150 m² puede estar en torno a los 2.000€. (www.climastar.es)

          La eficiencia de la bomba de calor aire-agua ofrece, incluso a bajas temperaturas del aire exterior, una cómoda calefacción de ahorro de energía y agua caliente. La bomba de calor  consta de una unidad exterior y otra  interior, que están conectadas por líneas de refrigerante.

          La unidad exterior, resistente a la intemperie, está instalada en un pedestal junto a la casa. La unidad interior se instala como cualquier otro sistema de calefacción en la sala de control de la casa. El calor se distribuye a través de un sistema de calefacción por suelo radiante o radiadores de pared, de convección natural o forzada, por agua.  El funcionamiento de la bomba de calor es  reversible, permitiendo en  los días calurosos de verano enfriar la vivienda. Por lo tanto, la bomba de calor proporciona una temperatura agradable durante todo el año.

         Las sondas geotérmicas utilizan el calor almacenado en el suelo. Son dos tubos de plástico en forma de U en un pozo vertical. Requieren poco espacio, el diámetro de la perforación es aproximadamente del tamaño de un CD. La temperatura a partir de 10 metros de profundidad es casi constante todo el año. La sonda geotérmica es muy eficaz, especialmente en invierno a temperaturas bajas. La profundidad de la sonda dependerá de la demanda de calor y la conductividad térmica del suelo. También sirve para refrescar en verano.

          Los colectores son tuberías instaladas horizontalmente, aproximadamente entre 1 y 1,5 metros de profundidad. Para ello se necesitan, en función de la potencia térmica deseada, alrededor de 200 a 250 metros cuadrados para una vivienda unifamiliar. Este área no debe ser sellada o construida, ya que el suelo tiene que absorber el calor del sol y el agua de lluvia.